La colonia de cigueñas que habita en el tejado de San Esteban se mudará próximamente. Las orillas del Valdeginate ya se preparan para convertirse en su nuevo hogar.
Con una medida de 14 metros de altura sobre los que se ubicará la plataforma que soportará los nidos, será necesaria una grua con pluma para alzar los postes de madera que quedarán anclados en el suelo gracias a las peanas color verde que han sido fijadas con cemento.
La intención de estos 16 postes, colocados en ambas orillas del rio, es la de librar el tejado que se encuentra en proceso de restauración de estas aves que durante años han provocado, sin desearlo, goteras y desperfectos en el templo.
Una vez alzados los postes, continuará el proceso de migración, gracias a una pareja de cigueñas amaestradas que llegaran desde Santo Domingo de la Calzada que enseñaran a las cigueñas de Castromocho a trasladarse a su nuevo hogar sin necesidad de recurrir a métodos que interfieran en la vida y habitat de estas aves zancudas.
Casualidades o no, el proceso de la mudanza de las cigueñas comenzará el día 3 de febrero, San Blas. Cumpliendo por tanto el refrán ‘Por San Blas, la cigueña veras’.